Por: Carla Bocanegra Rojas, Sub Gerente de Administración y Finanzas
La importancia de fomentar la cultura empresarial radica en la necesidad innata de los seres humanos de relacionarse y sentirse parte de un grupo. Cuando esto ocurre, nos sentimos seguros, contribuyendo a nuestro crecimiento personal continuo.
En el contexto empresarial, es esencial tener un grupo humano que comparta lineamientos, valores y principios, que sirvan de pilares para avanzar hacia los objetivos comunes y personales. La cultura empresarial abarca los modelos de gestión, los métodos de trabajo, la relación con los stakeholders, la calidad de servicio y la imagen corporativa.
Sin embargo, con la tecnología, la forma de relacionarnos ha variado con el tiempo. Con la transformación digital, las organizaciones han pasado de estructuras jerárquicas a enfoques más horizontales, reconociendo que cada empleado es un recurso fundamental.
Las herramientas tecnológicas han permitido mayor acercamiento entre las empresas y sus empleados, permitiéndoles escuchar, analizar y proponer estrategias claves para el trabajo diario. Esto ha impulsado la motivación y el compromiso de los empleados, quienes sienten que forman parte de la misión y visión de la empresa.
¿Qué logramos con la tecnología?
En una era donde la comunicación y la colaboración son fundamentales, la tecnología nos permite reforzar e interiorizar la cultura empresarial de diversas maneras, por ejemplo:
Comunicación en línea: Las herramientas de comunicación en línea permiten llegar a todos los colaboradores, independientemente de su ubicación geográfica. Esto facilita la difusión de los valores y principios de la empresa.
Desarrollo y formación: La tecnología proporciona acceso a recursos educativos, lo que ayuda a elevar el nivel de conocimiento y competencias de los empleados, alineándolos con la cultura de la empresa.
Automatización de procesos: La automatización de tareas y procesos contribuye a una cultura empresarial más eficiente y orientada a la innovación, ya que libera a los empleados de tareas rutinarias para que puedan concentrarse en actividades más estratégicas.
Reconocimiento: Las plataformas tecnológicas permiten reconocer y recompensar a los colaboradores por su desempeño, fomentando un ambiente de gratitud y motivación.
Feedback: Las empresas pueden utilizar la tecnología para recopilar comentarios y opiniones de los empleados, lo que les brinda la oportunidad de mejorar continuamente y ajustar su cultura organizacional.
En resumen, la tecnología permite llegar a un amplio espectro de empleados, fortaleciendo la cultura empresarial previamente establecida con una estrategia sólida y clara.
La tecnología desempeña un papel fundamental en el fortalecimiento de la cultura empresarial al facilitar la comunicación, la formación, la motivación y la gestión de procesos internos.
La gestión humana ha evolucionado gracias a la tecnología, la forma en que las empresas se relacionan con sus empleados ha cambiado y, en última instancia, ha mejorado la eficiencia y efectividad en la consecución de objetivos.
Las empresas deben utilizar los distintos medios para llegar y abordar a cada uno de sus colaboradores, de tal forma que cada fundamento plasmado en la cultura organizacional no sea únicamente parte de la “FOTO”, sino de la película diaria.